Los de Armando de la Morena viajaron a tierras lucenses para luchar por la permanencia en el último momento de la Liga. Un equipo replegado en su terreno, un jugador menos y mucha presión fueron el cóctel perfecto para
A falta de cinco partidos para el final de la Liga, los de Armando de la Morena, colistas de la Primera RFEF, saltaban al terreno de juego del Anxo Carro con mucha presión por hacerse con una permanencia casi imposible. Y así, el CD Lugo supo poner contra las cuerdas a los visitantes por medio de Ledesma con un cabezazo que se estrelló contra el larguero. El esférico comenzaba a fluir y el Rayo Majadahonda comenzaba a tener alguna oportunidad por las bandas. Ambos conjuntos se disputaban el dominio, pero los arietes lucenses seguían internándose en la zaga majariega, haciendo actuar a Dani Martín, que conseguía mantener el luminoso inalterado.
En una acalorada discusión entre uno de los centrales locales y Sergi, tras encararse con Camacho, el colegiado tomó la decisión de enseñar una roja directa a Sergi. Con uno menos en el terreno de juego era el momento de redoblar esfuerzos. Tras una gran entrada en la zaga majariega, Jozabed, lograba poner el primer tanto del partido, 1-0 dejando a los de Armando de la Morena con más presión, si cabe, en su salida a vestuarios.
Volvía el juego al Anxo Carro con un Rayo Majadahonda venido arriba, pese a la inferioridad numérica, que con un testarazo inapelable de Kike Hermoso, ponía el marcador en tablas, 1-1. La segunda parte parecía estarles saliendo mejor a los de Armando de la Morena, que comenzaron a buscar el gol de la victoria. Pero los lucenses encontraban las calvas en la escuadra majariega haciendo actuar a su zaga que repelía cada llegada del CD Lugo. Pero la inferioridad numérica se hizo notar cuando de nuevo los de Armando de la Morena tuvieron que dar un paso atrás. La meta majariega aguantaba a duras penas la enorme presión de los locales, y tras un saque de banda polémico, Armando de la Morena protestaba airado, provocando que el cuarto árbitro solicitara amonestarle, teniendo que abandonar el terreno de juego a los pocos minutos. Fue entonces cuando, en un balón muerto en el área en los minutos finales, el Lugo logró adelantarse por medio de Aranda. Y en la última jugada del encuentro, Antonetti ponía el tercero, para terminar de sentenciar el partido, 3-1.
Así, el Rayo Majadahonda pierde en la práctica la oportunidad de salvarse del descenso, a falta, ahora, de cuatro partidos que, de ganarlos, no serían garantía de permanencia de Primera RFEF. El Sabadell, decimosexto en la tabla, cuenta con 37 puntos, salvándose, de momento, por los pelos del descenso, pero el Rayo Majadahonda, con 25 puntos como colista, y a falta de cuatro encuentros, únicamente tiene la posibilidad de sumar 12 puntos. Y frente a equipos como el Nástic se antoja complicado sumar tres puntos. Aunque es turno ahora para preparar el encuentro frente al Osasuna B, el próximo fin de semana en el Cerro del Espino.
Un afectado Armando de la Morena explicaba, tras el encuentro en sala de prensa que “es una pena, con el esfuerzo que han hecho los jugadores podríamos habernos adelantado. La primera parte nos costó, la expulsión es determinante y así es complicado competir”.