Rosa Gil, CEO y fundadora de Publi Todo Color, fue la protagonista de un nuevo “Martes del Emprendimiento”, organizado por el Instituto de Emprendimiento Avanzado y patrocinado por Iberdrola.
El evento fue conducido por el presidente de la escuela de negocios, Juan Claudio Abelló. Gil, una apasionada de las ventas, destacó su visión del comercio: “Las ventas permiten que otros luchen por sus sueños gracias a lo que tú les puedes aportar”, explicó.
Psicóloga especializada en Recursos Humanos, Gil comenzó su carrera dando clases a niños para cubrir sus pequeños gastos. Posteriormente, se mudó a Londres como au pair durante dos años, con el objetivo de aprender inglés. Su trayectoria académica incluye un MBA en Suiza, tras lo cual ingresó en una multinacional de implantología como secretaria, y 18 años después, salió como vicepresidenta de mercados. A pesar de su éxito profesional, Gil nunca ha dejado de formarse. Actualmente, cursa un máster en Inteligencia Artificial, convencida de que “la falta de formación conduce a la frustración de los emprendedores”.
La conversación gira sobre el tabú de la rama comercial que sufren los emprendedores. Gil sostiene que “tenemos vergüenza de decir que somos vendedores, pero el español es innatamente comercial. Desde niños, negociamos todo. Podemos ser excelentes en la venta, especialmente en la digital”. Sin embargo, advierte que aunque ahora se reciben clientes a través de medios digitales, “no se pueden saltar pasos”. Para ella, es crucial dominar las ventas tradicionales antes de entrar en el ámbito digital, ya que “eres tú quien le indica a la máquina qué hacer”.
Formación y ventas integrales
Actualmente, Gil está enfocada en la formación de comerciales 360, abarcando todos los aspectos de la venta. “Creo que soy el mejor ejemplo de mi propio método”, asegura. Según ella, el cliente actual “odia las ventas, se siente intimidado y presionado”. Aquí es donde entra en juego el neuromarketing, disciplina que destaca cómo “el 80% de los factores en la toma de decisiones son emocionales”. Gil cree firmemente que la combinación de formación, pasión y sentido común es clave para cualquier emprendimiento exitoso. “A mí me encanta aprender. Siempre aprendo más de lo que enseño”, confesaba.
Además de la venta y la formación, Rosa Gil busca transformar el sector de las imprentas con su empresa, Publi Todo Color. Su objetivo es adaptarlo a la era digital sin perder el contacto humano. “Escuchamos a nuestros clientes. Hay que saber comunicarse y cuidarlos. Yo prefiero el cara a cara, esa experiencia te hace mejorar”, asegura.
Publi Todo Color: Innovación constante
Fundar y lanzar Publi Todo Color no fue fácil. Gil cuenta que su empresa tardó ocho años en consolidarse, aunque a los cuatro ya pensaban que podían fracasar. Sin embargo, insiste: “Si quieres seguir en el mercado y crees en tu producto, debes actualizarte”. Gil busca diferenciarse en un sector altamente competitivo, analizando y mejorando constantemente lo que hace la competencia, ya sea con un motor de búsqueda más eficiente o con una función offline. “Es tan importante crecer como mantenerse fiel al cliente”. Con las últimas tecnologías a su disposición, la empresa se ha expandido al sector del merchandising, aunque su foco principal está en la publicidad digital y su producto estrella: la tarjeta digital.
Publikard: La tarjeta digital del futuro
La tarjeta digital, bautizada como “Publikard”, es mucho más que una tarjeta de contacto; es una especie de web personalizada. “Con ella puedes mantener tu información siempre actualizada”, explica Gil. Esta herramienta permite compartir información de forma rápida, eficiente y ecológica, ya sea online o offline, y funciona en todos los dispositivos. Las posibilidades son amplias: desde compartir redes sociales, currículum, ecommerce, vídeos, imágenes o incluso el menú del día de un restaurante. Además, con una sola tarjeta se pueden crear varios perfiles según el contexto en el que se utilice. “Creo que el futuro de la imprenta está en los teléfonos móviles”, añade, ya que “es el futuro de las conexiones, para estar siempre disponible y ser memorable”.
Un futuro con visión y constancia
Rosa Gil está cómoda con el tamaño de su empresa, aunque no descarta la entrada de inversores en un futuro. Sin embargo, aclara que si vende, “no me iré a la playa”. El proyecto de Publi Todo Color fue autofinanciado mientras trabajaba por cuenta ajena, lo que le permitió aprender gradualmente sobre el negocio y de sus clientes, logrando establecer la empresa “sin problemas de caja”. Aunque la formación online aún no es una de las líneas más desarrolladas de sus emprendimientos, Gil espera que crezca en los próximos años. Su objetivo es que más personas puedan beneficiarse de su conocimiento y desarrollarse.
En un futuro, se imagina gestionando sus negocios de forma remota, “desde la playa, con mis nietos, ayudando a otros a alcanzar sus sueños”.