Vanesa Bolaños, consultora de imagen personal y medicina estética, ha protagonizado un nuevo Martes del Emprendimiento, organizado por el Instituto de Emprendimiento Avanzado, con la presencia de estudiantes de la universidad Ulacit de San José de Costa Rica y dirigido por el CEO de esta escuela de negocios, Wilfredo Jurado, y su presidente, Juan Claudio Abelló.
Con una trayectoria de más de dos décadas, Vanesa Bolaños ha evolucionado desde la peluquería hasta la dirección de clínicas estéticas, pasando por el protocolo y la asesoría de imagen. Esta rica experiencia culminó hace un año en la creación de su innovador proyecto, una respuesta directa a la necesidad de sus clientes de integrar la imagen externa con el bienestar interno. “Buscaban siempre la otra parte”, afirma Bolaños.
Su servicio integral, disponible tanto online como presencial, se dirige principalmente a mujeres, aunque también a hombres, ofreciendo un asesoramiento que abarca desde la imagen, la colorimetría y la morfología hasta el visajismo y el estilismo. Esta completa visión se complementa con la guía médica en áreas como la cirugía plástica y la medicina estética facial, capilar y corporal.
La clave del enfoque de Vanesa reside en trabajar la mentalidad del cliente, abordando inseguridades y complejos internos como base para la construcción de una imagen externa sólida y auténtica. Su metodología incluye material de trabajo para el hogar y sesiones durante cinco semanas, seguidas de un acompañamiento de dos meses.
Sus tarifas se adaptan a las necesidades individuales de cada cliente, pero Bolaños defiende firmemente el valor de su trabajo: “apoyo el precio que tengo por la calidad y el servicio que doy”. Su visión de la competencia es colaborativa: “no los veo como un enemigo, los veo como compañeros. La esencia que tengo yo no la tiene otro. No tenemos por qué gustarle al mismo cliente”.
Abierta a la posibilidad de crecimiento, aunque con cautela, Bolaños reconoce su “un poco de miedo” a incorporar socios por temor a diluir la esencia de su proyecto, aunque no se cierra a ello.
La imagen: un factor clave para las ventas
Durante su intervención, Bolaños subrayó el poder de la imagen personal como herramienta de venta en un sentido amplio: “La imagen habla antes de que tú sueltes la primera palabra”. Por ello, adapta sus servicios a las demandas específicas de cada cliente, ya sean eventos puntuales o cambios profesionales, ofreciendo una transformación integral, pero siempre respetando la individualidad: “siempre a razón de la persona”, explica esta asesora especializada en líderes.
Su consolidada experiencia, sumada al boca a boca y a su presencia en Instagram, aseguran una cartera de clientes constante, quienes, al experimentar los resultados, se motivan a continuar. Bolaños destaca el crecimiento del sector, comparándolo con la consolidación de servicios como los wedding planners en países como Colombia.
A pesar del desafío inherente a la escalabilidad de una marca personal, Bolaños ya colabora con clínicas y proyecta un futuro con un centro físico propio que centralice sus servicios y albergue un equipo especializado.
Concluyendo su participación, Vanesa Bolaños, quien valora enormemente “escuchar a otros emprendedores que ya han recorrido ese camino”, ofreció un consejo inspirador para futuros emprendedores: “Hay que quitarse el miedo del resultado, de si seré capaz de desarrollarlo o no. Creo que hay que arriesgarse y que, si caes, luego renaces. Pero si no lo intentas, nunca sabrás si funciona o no funciona”.