La Asamblea Comarcal de Cruz Roja en Majadahonda-Las Rozas, ha puesto en marcha un Proyecto para facilitar la búsqueda activa de empleo a personas refugiadas y demandantes de asilo, con el fin de acompañarles a lo largo del proceso.
Según informan desde la ONG, el Proyecto se denomina “Itinerarios de inserción laboral para la mejora de la empleabilidad de personas solicitantes y beneficiarios de protección internacional” y es nuevo en la Asamblea, donde se ha hecho cargo del mismo la técnico María Castellanos, quien también lo desarrolla en la Asamblea de Cruz Roja en Pozuelo de Alarcón.
Explica Castellanos las diferencias que existen entre este programa de búsqueda de empleo sobre otro programa que no esté destinado a personas solicitantes de asilo, señalando que la diferencia es “el perfil del demandante”.
“En este caso son personas que han solicitado Protección Internacional o Asilo. Muchas cuentan con el “Resguardo de presentación de solicitud de protección internacional”, la primera tarjeta que llamamos la “tarjeta blanca”, porque es una hoja blanca, que tiene una duración de 9 meses. Los primeros seis meses les adjudican un número de NIE y permiso de residencia, pero no de trabajo. Los tres últimos meses se les habilita el permiso de trabajo”, detalla.
Así, indica que en Cruz Roja “se les atiende desde el primer día, tengan permiso de trabajo o no”, por lo que el foco “va a estar en la formación”. Resalta que se trata de prepararlos para la “búsqueda de empleo”, de manera que, “cuando tengan el permiso de trabajo, puedan hacer esa búsqueda de forma más activa”.
“Este proyecto se centra, sobre todo, en trabajar las competencias transversales, la formación y las habilidades técnicas, para que, cuando obtengan el permiso de trabajo, tengan más posibilidades de inserción”, puntualiza.
La técnico indica que una vez que tienen el permiso de trabajo se ponen en marcha la “intermediación laboral” y las herramientas para la búsqueda de empleo que se han ido trabajando previamente.
“Se empieza desde cero, desde la definición de los objetivos laborales, lo que conlleva un ajuste de expectativas, ya que en sus países igual son gente muy preparada, con carreras, con una profesión o un oficio que han desempeñado durante muchos años, pero que en España no tienen la titulación homologada y en muchos de los casos, ya no van a poder dedicarse a su profesión”, subraya.
En este sentido, resalta que para ese “reajuste” tienen que “conocer” el mercado laboral que hay en España y ajustar “por ejemplo los curriculum a la búsqueda que van a hacer”. En cuanto a los países de los que provienen estas personas, la mayoría procede de Venezuela, Perú o Colombia. “De Ucrania, de momento, no nos han llegado hasta ahora”, añade.
“Se trata de formar a la persona para un oficio, por ello algunos de los cursos tienen parte teórica y parte práctica. Además contamos con un departamento de intermediación laboral en el que las prospectoras laborales contactan con empresas y consiguen ofertas de empleo que nos ofrecen junto con el perfil demandado”, detalla.
Concluye que este mes se publica otra convocatoria para nuevos talleres de búsqueda de empleo para solicitantes de asilo y que el proyecto se financia con el Fondo Social Europeo y el Ministerio de Inmigración.
