La deriva que está tomando el caso del edificio okupado en Majadahonda nos lleva a publicar nuestro primer editorial extraordinario. Se trata de un caso que cada día que pasa se está complicando más. El último episodio de este despropósito se ha vivido este viernes. El alcalde, José Luis Álvarez Ustarroz, mantuvo una reunión por la mañana con las asociaciones vecinales en la que este tema estuvo encima de la mesa. Y por la tarde se grabó un vídeo a las puertas del edificio okupado para denunciar que si esto ha ocurrido es por culpa del gobierno de Pedro Sánchez y sus socios que facilitan con las leyes que aprueban este tipo de comportamientos. ¿Qué ley favorece estos comportamientos? La ley de vivienda de la que tanto se ha hablado en los últimos meses sigue en tramitación y no tiene un horizonte claro de que vaya a aprobarse.
Actualmente, la ley para el desalojo de viviendas ocupadas entró en vigor en 2018 y contempla un plazo de 5 días para desalojar a los intrusos. El PSOE presentó una enmienda el pasado mes de noviembre a la Ley de Enjuiciamiento Criminal para acortar ese plazo y que los jueces puedan echar a los okupas en el plazo de 48 horas. Quizás, el alcalde se refería a esta enmienda. A esto hay que sumar que, según los datos oficiales del Consejo General del Poder Judicial del último trimestre, los procedimientos judiciales por okupaciones han caído más de un 30%, con respecto al mismo periodo del año anterior y con respecto al mismo periodo del año 2019, el último antes de la pandemia.
Este periódico no pretende hacer apología de la okupación. Las personas que han entrado por la fuerza en el edificio y se han apropiado de las 20 viviendas deben ser expulsadas inmediatamente del inmueble. La inseguridad que se ha instalado en pleno centro de la ciudad, donde se encuentra el bloque de viviendas tiene que conjurarse en el menor tiempo posible. Lo que este periódico denuncia es la desinformación y la fabricación de bulos para tratar de tapar una mala gestión. Si es grave la fabricación de fake news por parte de las instituciones públicas, más grave resulta cuando lo hace su máximo representante. Álvarez Ustarroz acusa al presidente del Gobierno de ser el responsable de una okupación en Majadahonda. ¿Alguien se imagina a Pedro Sánchez conspirando en su despacho de Moncloa para favorecer a okupas con un mapa de Majadahonda encima de la mesa? El trazo grueso no vale en política y el comodín Pedro Sánchez no es el as en la manga para todo. De tanto usarlo se va a volver en contra del Partido Popular. Seguramente sea más eficaz iniciar conversaciones con el propietario del edificio que podrá arrojar luz sobre lo que ha ocurrido y es el más interesado en poner punto y final a esta situación.
Los vecinos denuncian que entre este grupo de personas hay algunas que llevan años haciendo esto y que la entrada ilegal no es nueva. Se produjo hace más de un mes. La diferencia es que en esta ocasión los medios de comunicación se han hecho eco de la inseguridad, del trapicheo de drogas y se ha producido una agresión a un cámara de telemadrid que condenamos sin paliativos. Esa es la diferencia y no la política legislativa del Gobierno de Pedro Sánchez. El Ayuntamiento de Majadahonda puede y debe pedir ayuda si lo necesita a la Delegación de Gobierno, pro no es un BUEN COMIENZO echar la culpa a quien quieres pedir ESA ayuda.