Maria Luna, creadora de OrdenHub e Issac y Ana, CEOs de Spiralia han protagonizado un nuevo Martes del Emprendimiento, en el vivero de empresas INNPAR, con la colaboración del Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón, y organizado por el Instituto de Emprendimiento Avanzado, con el patrocinio de Iberdrola. Susana Penedo, concejal de Comercio, Empleo y Desarrollo Empresarial de Pozuelo, ha puesto el valor el emprendimiento local, con dos ejemplos de éxito.
“El orden es una herramienta muy poderosa”
OrdenHub aúna la pasión de su fundadora por el orden y su vocación por la educación. Luna busca “ayudar a familias a transformar sus hogares en espacios de bienestar, de calma, de armonía. Pudiendo deshacerse del desorden, del caos, no solamente organizando sus espacios, sino ofreciéndoles soluciones que impacten en el bienestar y en la funcionalidad de la vida familiar”.
“Hay mucho desconocimiento de lo que significa contratar un organizador profesional. No ordena, devuelve la funcionalidad a los espacios”, contaba Luna, que sirve como guía para sus clientes, otorgándoles las estrategias necesarias para hacer real ese orden, porque “cada vez hay más conciencia social de que el orden impacta positivamente en nuestra salud mental”, explicaba Luna, Además, la estética, aunque importante, pasa a un segundo plano, poniendo como prioridad la creación de un espacio funcional.
Sus clientes buscan cubrir una necesidad “que no pueden suplir por sí mismos. Por ejemplo, tú ya te das cuenta de que para buscar una cosa nunca la encuentras, o nunca te da tiempo y es el cliente el que a mí me dice, es que necesito ayuda, es que yo ya no puedo más”.
Este tipo de proyectos han de tener muy en cuenta el factor humano, por emociones como el apego a los objetos, por lo que Luna tiene que “ayudar al cliente a decidir qué es lo que no quiere. Sobre todo, en los periodos de premudanza”.
Cuenta con acuerdos de colaboración con empresas de mudanza, manitas o limpiadoras de confianza, para brindar un servicio más completo. Por lo general trabaja sola, aunque dependiendo del tamaño del proyecto, colabora con otras organizadoras.
Todo comienza con una visita para una valoración inicial, en la que Luna detecta las necesidades, mano a mano con cada cliente, para ayudarle a tomar las decisiones necesarias para alcanzar ese orden. Para lo que diseña un planteamiento individualizado, con unas estrategias a seguir, y una serie de pautas para mantenerlo en el tiempo, aunque tiene clientes recurrentes, que le llaman, por ejemplo, una vez al año.
“El orden es una herramienta de bienestar y el orden no es un lujo, estás invirtiendo en tiempo y en salud mental”, concluía la creadora de OrdenHub.
“Apostar por el detalle y la confianza como garantía del éxito”
Spiralia es una agencia de comunicación y eventos premium, que se divide en cinco líneas de negocio, tras un reciente rebranding: comunicación, eventos, team building y producciones audiovisuales. Cuentan con clientes de la talla de Coca-Cola, el Banco Santander, ING o Iberdrola, pero que nacieron en un pequeño despacho del vivero de empresas INNPAR.
“Somos un servicio muy centrado en las personas, en generar vínculos de confianza, en apostar por el detalle como garantía del éxito y por la belleza”, detallaba Isaac, que aseguraba no haber invertido en publicidad, apostando por el boca a boca, incluso a puerta fría.
Para Isaac el secreto está en “tener un equipo humano muy bueno y mucha constancia y mucho trabajo. Hay que ser muy sinceros y generar un vínculo de confianza, te conviertes en un solucionador de problemas, un apéndice de la empresa que te contrata”.
“Cuando un cliente no te conoce, es muy difícil vender un servicio que es un poco humo, y la manera de entrar y de ganarme su confianza, es respetar su entorno financiero y un poco sus expectativas. Tienes que estar muy convencido de lo que ofreces. Estar muy seguros y muy preparados a la hora de defender nuestro presupuesto”, explicaba Ana, que comenzó buscando clientes a puerta fría.
“Siempre damos un servicio mucho más completo del que el papel realmente refleja, porque el objetivo es que al final se fijen en tu servicio y menos en tu precio.
Esa confianza, además de a su propio equipo, se extiende a sus proveedores, muchos de pequeño tamaño, con los que contratan regularmente, “creando confianza en las dos direcciones”.
En ese comienzo, en el vivero INNPAR, con sus propios recursos, hace diez años, “los roles se fueron asignando por las virtudes de cada uno. Somos muy distintos, pero nos complementamos, y sabemos discutir”.
Los planes de futuro de Spiralia son “seguir creciendo, pero con orden. Para no perder el cuidado que damos y la atención que ponemos en los detalles. Y también poder dirigir más y quizás pasar menos noches en vela”.
María Luna se ve como “un referente del orden y la organización y planea crear una escuela online para padres mediante talleres y cursos, para que puedan implantar estrategias de orden en sus hogares en el día a día”. E incluso más a largo plazo quiere “ser formadora y certificadora de futuras organizadoras profesionales”.
Como consejo para los futuros emprendedores, Luna destaca que “elijas algo en lo que creas desde la pasión, que aporte algo a la sociedad y que te rodees de gente que crea en ti. Con actitud, valentía y con pasión. Va a haber muchos obstáculos por el camino, pero es que es apasionante”.
Según Isaac, “realmente si lo crees, lo creas. Porque no hay nada más poderoso que una idea a la que le ha llegado su momento”.
Mientras, Ana culminó afirmando que “no hay que tener miedo a tomar un riesgo. No pasa nada si no sale. Ya saldrá si tú crees en tu proyecto y tienes ese puntito de dar ese salto y de tomar ese riesgo”.