La Policía Local de Majadahonda dispone de sofisticados drones que incluyen una potente cámara que es capaz de captar la radiación infrarroja que desprenden los seres vivos y localizar los objetivos en condiciones de poca iluminación. El cuerpo policial cuenta hasta el momento con cuatro aeronaves, cuya utilización está regulada por un Reglamento específico.
Según se recoge en este documento, los dispositivos podrán ser utilizados en labores de vigilancia aérea de tráfico y seguridad vial; observación y evaluación de incendios, accidentes, vertidos; control de aforos; colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado cuando la Policía Local sea requerida para ello; persecución de infracciones y delitos y operaciones de emergencia, búsqueda y salvamento, entre otras cuestiones.
En declaraciones a En Papel, el subinspector Jefe de la Policía Local, Ismael Illán, ha explicado que se trata de “aparatos multirrotores” que facilitan el trabajo en materia de seguridad. Por ello, a la funcionalidad de la cámara, dotada de un potente zoom óptico, se ha sumado la detección térmica.
“Es una cámara térmica visual. Es perfecta para la noche o situaciones de poca luz, pudiendo trabajar y localizar a las personas por emisiones. Los cuerpos desprenden una radiación infrarroja, que al final es calor, y esta emisión cuanto más caliente es, mucho mejor. La longitud de onda de esta energía es recogida por la cámara termográfica, para después interpretarla. Las imágenes se detectan por una zona rojiza, muy viva, dentro de lo que sería una pantalla bastante oscura, aunque se podrían delimitar edificios o caminos… simplemente lo que se hace es localizar un ser vivo. No podríamos ver perfectamente a la persona, pero sí un cuerpo y nos ayuda mucho a la hora realizar búsquedas”, indica el responsable policial.
“completamente silenciosos”
Cita como ejemplo una actuación que se efectuó tras una reyerta, en plena noche, cuando un individuo huyó y se ocultó entre unos matorrales en una zona de campo. “Buscar a una persona por la noche en un espacio así es complejo. Sin embargo, cuando se desplegó el dron fue relativamente sencillo localizarlo, cerca de un camino, por lo que se procedió a su detención”, detalla.
Y es que el dron es “completamente silencioso” y es capaz de “trabajar a mucha altura” por lo que “no es fácil de detectar, en este caso por el individuo que quiere huir”. Sin embargo, su utilización no solo se puede circunscribir a la detención de personas, sino que también se puede utilizar en rescates o en detección de animales. “Al emitir la radiación infrarroja son fácilmente detectables”, puntualiza Illán.
Según explica, la plantilla está “muy satisfecha” con la utilidad de estas aeronaves, destacando que se pueden realizar controles visuales en “grandes áreas” en “muy poco tiempo”, lo que permite una mayor efectividad “a la hora de tomar decisiones”.