La esperada nueva pasarela peatonal de Roza Martín, una conexión clave con el centro de la ciudad, ha abierto finalmente al público tras las obras que finalmente han supuesto una inversión cercana a los 3,5 millones de euros.
Después de casi dos años desde que se reiniciaran unas obras que deberían haber acabado el verano pasado, aunque el incidente que provocó la pérdida de los tirantes y el mástil hace poco más de un año, retrasó la apertura de esta infraestructura clave, que ahora vuelve a permitir a los vecinos de la urbanización de Roza Martín conectarse directamente con el centro de la ciudad.
El proyecto ejecutado ha supuesto una mejora significativa del diseño inicial, incorporando medidas reforzadas de seguridad, protección y accesibilidad para los viandantes. Este paso peatonal colgante que cruza la M-503 y está próxima a la M-50, facilita de nuevo el acceso no solo a vecinos sino también a trabajadores de la zona, que se encontraban a diario con problemas y retrasos para desplazarse por la zona.
Su estructura presenta un trazado curvo de 140 metros de longitud, flanqueado por dos tramos rectos a ambos lados, cada uno de 20 metros. Destaca un gran mástil exterior que se eleva 26 metros sobre la glorieta que regula la intersección de las carreteras M-503 y M-516. De este mástil parten dos cables principales y péndolas (tirantes) que soportan el borde exterior de la planta en curva.
Las obras han incluido modificaciones en la barandilla y los elementos de contención de vehículos en las carreteras M-516 y M-503. Se ha prestado especial atención a la iluminación, con luces LED integradas en el pasamanos en las zonas de tránsito, farolas en las rampas de acceso y aceras. También se han instalado señales luminosas en los pasos de peatones adyacentes, cerca del colegio y en el ramal de salida de la M-503.
La nueva pasarela mejora notablemente la accesibilidad al colegio Virgen de Lourdes y a la residencia y centro ocupacional Las Jaras para personas con discapacidad intelectual. Además, la zona destinada a peatones, entre la glorieta de la M-503 y la de Los Negrillos y Leroy Merlín, se ha ampliado para asegurar un itinerario totalmente accesible.
Con este proyecto, el Ayuntamiento busca conciliar estética, funcionalidad y movilidad segura y sostenible en un entorno de intenso tráfico rodado, ofreciendo una solución largamente esperada por la comunidad.