Los medios de comunicación contamos las cosas cuando pasan y les hacemos seguimiento hasta que ese seguimiento deja de tener interés o, lo que es peor, exige una inversión que no podemos permitirnos y dejamos de hacerle seguimiento. Cuando eso pasa con una guerra, con una invasión de un país a otro sin causa justificada es dramático. La invasión rusa entraba, al cierre de esta edición, en su semana número 11. Los medios que aún siguen sobre el terreno nos cuentan las atrocidades de la guerra. Los ucranianos en Mariupol se despiden de familiares y amigos en directo. Los ataques contra refinerías y depósitos dejan al país sin combustible. A Quico Alsedo, periodista de El Mundo, que estuvo en Ucrania le preguntamos a qué huele la guerra y nos respondió que “a miedo, a rabia y a tristeza”.
“Todos podemos ayudar en función de nuestras posibilidades“
En este número revelamos que 169 familias de nuestra ciudad han solicitado acoger a refugiados ucranianos. Eso es sin duda una buena noticia que debería hacernos sentir orgullosos de nuestros vecinos. Sin embargo, este torrente de solidaridad se está dando de bruces con la realidad. Esta pasada semana hemos conocido que casi la mitad de las 2.300 familias españolas que se han ofrecido a acoger a ucranianos ha desistido por los requisitos que exige el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y que creemos necesario que se hagan públicos en estas líneas. No hay ayudas económicas para la familia que acoge, el acogimiento es por un periodo mínimo de seis meses y el programa está pensado para acoger a familias enteras o monoparentales, no se trata de acoger un niño. Por eso, 900 solicitantes han desistido. 200 familias han pasado las pruebas de selección, pero aún no han culminado el proceso y solo nueve están a la espera de acoger a refugiados en sus hogares.
Las 169 familias de Majadahonda que se han ofrecido a acoger a refugiados ucranianos puede que no conocieran el detalle de estos requisitos que no deben hacerles desistir porque nuestra solidaridad de hoy es su esperanza de mañana. El Alto Comisionado de la ONU para los refugiados cifra en 5,6 millones el número de refugiados ucranianos y estima que si no se para la invasión se podrán superar los ocho millones de desplazados. De ellos, 130.000 están en nuestro país y buscan un hogar y una familia que pueda ayudarles a dibujar un futuro. Si estás leyendo estas líneas y tenías dudas sobre si apuntarte o no a este programa de ayuda a los refugiados ucranianos, esperamos haberte podido ayudar a despejarlas.