Ignacio Moreno, cofundador y CEO de Solama, ha protagonizado un nuevo Martes del Emprendimiento organizado por el Instituto de Emprendimiento Avanzado, con el patrocinio de Iberdrola, que ha conducido el presidente de la escuela de negocios, Juan Claudio Abelló.
Soalma es una plataforma que facilita la planificación del legado y ayuda a hacer la vida más fácil a las personas que nos sobrevivirán. La propuesta es crear un legado digital, donde compartir recuerdos, consejos, documentos e instrucciones importantes, palabras para momentos especiales o historia y recetas familiares, entre una infinidad de posibilidades, para nuestros seres queridos “ahora y siempre”.
“Mi padre falleció hace casi cinco años, somos cinco hermanos, y había un montón de cosas que no sabía… Lo que más me llamó la atención fue un álbum de fotos antiguas donde yo no podía identificar a algunas de las personas que aparecían. A lo mejor de joven no tienes esa inquietud, pero cuando ya eres padre, te empieza a importar de donde vienes, y la transmisión del legado de tus padres, suegros. Porque una vez que nosotros morimos, nuestra persona continúa, se perpetúa nuestra esencia en aquellos que nos suceden. No había ninguna tecnología que nos ayudara a eso. Mi padre había tenido en sus últimos años de vida mucho tiempo para poder haber grabado varios audios y vídeos, sobre eso, contándonos nuestros orígenes. Y supe que había una base para desarrollar un proyecto vital que de cobertura a esta necesidad“, explica Ignacio Moreno.
Hace dos años conoció a su socia, Fara, en un foro de emprendimiento en Washington. Ella también tenía un proyecto similar, “pero desde un punto de vista más logístico. Un familiar de la India había fallecido, y no había documentación. Ella creía que debería ser más fácil, porque ya tenemos el dolor emocional”. Entonces se unieron para “aterrizar” esta idea. “Cuando te casas con alguien para hacer un proyecto, es muy importante conocer con quién lo haces. Puede que tengan una visión distinta o una forma de hacer diferente”, remarca Moreno.
La brecha del legado
“La idea inicial era cerrar esa brecha que se produce cuando alguien fallece. Empezamos a entrevistar a personas que habían perdido recientemente, a personas queridas. Pero cuando llegó el Covid, hubo muchas historias muy duras e inesperadas de fallecimientos prematuros, donde hay cosas que se han perdido inesperadamente junto a su legado”, reflexiona Moreno.
“El legado no tiene que compartirse cuando uno ya no está. Por ejemplo, se puede aplicar en relación con tus hijos cuando vivan tus situaciones vitales”, explica Moreno, con ejemplos como la universidad, la paternidad o el matrimonio, para “que puedan conocer los miedos e incertidumbres a los que yo me enfrenté”. Se puede compartir con quien se desee, y en un momento concreto. “Todos los elementos que acoge Soalma son cosas importantes, que tienen un objetivo, que puede ser emocional o meramente práctico, y que va a tener aplicación en el futuro. Cosas muy útiles o prácticas”, recuerda Moreno. De esta manera se puede determinar con quién, en que momento y bajo que circunstancias se va a compartir. “Cuando tú subes un legado, hay una serie de campos en los que puedes poner textos explicativos, documentos, fotografías, vídeos, audios, con cualquier dispositivo, y lo compartes con la gente importante que has incluido en su universo de contactos”, explica Moreno.
Más haya de un testamento
Soalma es un proyecto internacional y la validez jurídica de lo recogido por esta plataforma depende del marco legal de cada país. Realmente es un complemento a todo lo que puede dejarse por escrito, por ejemplo, en una herencia. “Tú en el notario no dejas explicadas todas las cosas que quieres“, aclara Moreno, que insiste en que no hay que pensar en este servicio “únicamente pensando en el momento final de nuestra vida”. Otra de las aplicaciones que puede tener, es para la transmisión de estas ideas, reflexiones… a hijos de matrimonios divorciados, cuando uno de los progenitores se encuentra distante. O también para mantenerse en el recuerdo de personas con las que, por ejemplo, por motivos de distancia, no se puede seguir manteniendo el mismo contacto.
Cuentan con un modelo de suscripción anual, pero además tienen una opción gratuita, con una capacidad inferior, para darse a conocer. “Es un regalo para transmitir a aquellos a los que más quieras”. Su target principal son personas entre los 30 y los 60 años, que tienen hijos y padres mayores, y que ponen en valor la transmisión de un legado. “Nos interesan mucho las personas que no tienen tiempo, las personas mayores, incluso en residencias, porque incluso dejar esos recuerdos les ayuda cognitivamente a mantenerse frescos”. Además, garantizan la privacidad y que nunca se va a analizar la información que la gente almacena.
Están en plena campaña de difusión y divulgación de su plataforma en medios de comunicación y premios de emprendimiento. Según Moreno, la formación es fundamental en el emprendimiento, porque “tienes que saber lo que es una empresa, como funciona, pagar las facturas“. Pero “también es muy importante tener un contrapeso con la visión diferente de los socios y una estabilidad personal y familiar”.
Como consejos para los nuevos emprendedores, Ignacio Moreno, aclara que “los proyectos al final son una maratón. Si están bien planteados, con razonamientos lógicos y con equipos bien construidos y equilibrados, lo que hay que intentar es mantener ese equilibro, ser paciente y ser flexible, teniendo claro el objetivo que quieres perseguir”. “Cuando emprendes no todo son éxitos, pero si está bien planteado, con Soalma lo tengo muy claro, el valor que vamos a generar es brutal, pero huiría del oportunismo”.