A falta de 12 partidos para terminar la Liga, los de Jon Erice se colocan los penúltimos en la clasificación después de una derrota agotadora frente al Teruel, ahora un puesto por encima en la tabla, acabando con un 1-0 que lastra al Rayo Majadahonda al fondo de la Primera RFEF.
La vigesimosexta jornada liguera para el Rayo Majadahonda, en su visita a Aragón, fue un encuentro muy físico, en el que los puntos estuvieron repartidos por la suerte, tras la presión de los arietes turolenses y los fallos en la zaga del Rayo. El CD Teruel salió al terreno del Pinilla a tantear las líneas del Rayo Majadahonda que no lograba dominar claramente los primeros minutos. Las ocasiones llegaban para ambos equipos, vecinos en la tabla, que demostraban un juego y una potencia similares.
Era un partido de fondo, en el que ambos conjuntos se jugaban huir de las posiciones de descenso, con un nerviosismo que les hacía cometer varias imprecisiones, y sin poder mantener el control del esférico. Los primeros 20 minutos pasaron sin pena ni gloria, con ambos conjuntos más pendientes de no cometer errores que de tratar de dañar a su contrincante. Hasta que un fallo en la defensa majariega cedió el paso a Borja Martínez, que lograba definir el primer y único tanto del partido, 1-0, en el minuto 30.
Los de Jon Erice volcaron toda la presión por las bandas en una carga ofensiva que creó peligro para el conjunto local, pero sin la puntería suficiente. Exhaustos tras un juego muy físico, ambos conjuntos salieron hacia los vestuarios, donde los de Jon Erice cambiarían de táctica.
La segunda mitad parecía sonreír al Rayo Majadahonda, pero no consiguió materializar ninguna de las ocasiones. Los majariegos salieron imprimiendo una marcha más, dejando clara su intención de llevarse algún punto, con las dos ocasiones que tuvo Pablo en los primeros minutos, pero ninguno de los dos testazos subió al luminoso. Los de Jon Erice querían sumar al menos un punto, evitando así bajar de la decimoséptima posición de la tabla, y lo intentaron con mucha insistencia. Pero el empeño sirvió de poco, aunque Alberto Fernández estuvo a punto de igualar el marcador en un cara a cara con Taliby, el portero rival, que logró detener un tiro certero del extremo derecho majariego.
El cronómetro avanzaba y el Rayo Majadahonda iba recuperando el dominio del partido, pero el gol no llegaba. Los guantes del guardameta turolense eran un muro infranqueable con cada intento de los delanteros visitantes. Volvía a faltar precisión en la parte alta de campo, aunque el control del encuentro fuera de los de Jon Erice. En los últimos momentos, a punto estuvo Rubén Enri de igualar el luminoso con una de las ocasiones más claras del partido, pero que se fue contra el larguero.
El Rayo Majadahonda baja dos posiciones en la clasificación de Primera RFEF, empatado en puntos con el Sestao (22 puntos), el último de esta. Es una situación complicada tanto para los jugadores como para el cuerpo técnico, que si todavía pueden alcanzar la salvación, cada vez esta tiene un mayor precio. El entrenador del Rayo Majadahonda, Jon Erice, asumía para En Papel, que “es un trabajo que necesita tiempo“, en un cambio de planteamiento que “está aumentando mucho la exigencia a nivel físico y de concentración de los jugadores” y que todavía confían en que de resultados.
El colegiado Cánovas García-Villarrubia mostró cuatro tarjetas amarillas para el Teruel: Victor Sanchis, Nacho Castillo, Fran Tena y Julen y tres para el Rayo Majadahonda: Alberto Fernández, Sergi García y Raúl Tavares.
El conjunto majariego debe pensar ahora en el próximo partido contra el Real Club de Irún, un partido en el que se juegan no acabar como colistas de la tabla.