Laura Zalve, CEO y directora creativa de Laurissi, ha protagonizado un nuevo Martes del Emprendimiento organizado por el Instituto de Emprendimiento Avanzado, con el patrocinio de Iberdrola, que ha conducido el CEO de esta escuela de negocios, Wilfredo Jurado, y que ha servido para conocer una marca de joyería que busca especializarse a través de la literatura.
Zalve decidió empezar de cero y reinventarse tras desencantarse del mundo del marketing. Vio una oportunidad en el sector de la joyería, haciendo especial énfasis en el significado del anillo, collar o pulsera, que siempre tiene un mensaje inscrito, perteneciente sobre todo a poemas, por ejemplo de Bécquer, aunque también lo hacen con letras de canciones o frases de películas. Su venta es completamente online, aunque esperan poder abrir un local que mezcle la pasión por la literatura con la joyería. Las redes sociales son su gran fuerte, de donde proviene el 80% de sus ventas.
Desde hace algunos meses han realizado una pausa “porque lo quería hacer todo muy bien y me estaba quemando, y no estaba disfrutando”, cuenta la CEO de Laurissi. En breve volverán a relanzar su marca con un evento especial que ya preparan. Aunque nunca han parado de vender, porque Zalve cuenta con una comunidad de clientes, sobre todo mujeres de entre 25 y 45 años, que siempre están atentas a cualquiera de sus creaciones, como las ediciones limitadas que ha vendido a esa clientela selecta durante el descanso de Laurissi.
En cuanto a la producción, parten de un diseño propio que puede tardar entre tres y seis meses en ver la luz, después se hace un diseño 3D para probar la pieza, se crean los moldes, y se inicia la producción en una fábrica. Aunque la CEO de Laurissi comenzó a trabajar con pequeños talleres, la necesidad de stock le obligó a hacerlo en grandes fábricas. Todos sus productos son de oro o plata, y de momento solo se venden en España, aunque en ocasiones han hecho envíos a Latinoamérica. Los precios oscilan entre los 30 y los 70 euros, dependiendo de la complejidad del diseño y la cantidad de metal empleado, pero su margen de beneficio suele rondar el 40%. Aunque el packaing aumenta significativamente los costes.
Un sector muy competitivo
Su producto estrella son los anillos, lo más vendido con diferencia, aunque también han llegado a lanzar un perfume u otros complementos. “Este sector es prueba y error. Es muy importante mantenerse en una buena posición en las redes sociales, para que la gente se acuerde”, explica Zalve, que ha tenido mejores resultados con los pequeños influencers que con los que más seguidores tienen. “Mis clientas me suelen decir que antes no utilizaban joyas, y eso te hace sentir muy orgullosa”, asegura Zalve.
El equipo lo forman ella y su pareja, que se encarga de todo lo que no sea diseño o redes sociales. De momento no tienen socios, aunque no se cierran a la posibilidad de buscarlos para aumentar la cantidad de stock disponible. En cuanto a la competencia, admite que es un sector muy copado y que la competición de joyas de bisutería es muy grande, pero confía en su buen hacer, en su enfoque en la literatura y en su fiel comunidad. “Incluso me recomendaron no hacer técnicas SEO, porque en joyería es imposible destacar así”, admitía la CEO de Laurissi.
La protagonista de este Martes del Emprendimiento dejaba como consejo para los futuros emprendedores que “lo importante es hacerlo y ya, porque si te lo piensas mucho… Esto no es un camino de rosas, pero si no lo haces te vas a sentir a medias“.