La piscina cubierta de Huerta Vieja no será demolida. Así lo ha anunciado la alcaldesa de Majadahonda, Lola Moreno, tras convocar a los medios de comunicación para explicar que ha tomado la decisión de no derruir la instalación actual y optar por su remodelación.
La primera edil ha explicado que la remodelación de la piscina cubierta, que lleva cerrada casi dos años, supondrá, además de la reparación de los problemas que sufre la instalación, la mejora de la misma con más superficie, suelo nuevo, nueva zona de almacenamiento y nuevo vestuario infantil. Para el proyecto se contará con un presupuesto de ejecución plurianual de cuatro millones de euros.
“Tras estudiar la situación y los diversos informes técnicos de la Concejalía de Urbanismo, Vivienda, Obras e Infraestructuras, se llega a la conclusión de que la piscina, que está cerrada problemas estructurales, sí tiene arreglo. Se encargará un proyecto de remodelación integral de la misma que solucione los dos problemas principales que tiene la instalación. Por una parte, garantizar la seguridad de la estructura del edificio, y por otra, el arreglo del vaso de la piscina, que actualmente no se puede usar por las deficiencias que presenta”, han explicado desde el Ayuntamiento.
ACTUACIÓN INTEGRAL
En este sentido, la alcaldesa ha añadido que aprovechando el calado de la intervención que se va a desarrollar en la piscina, se va a actuar “de manera integral para mejorar el uso de la misma”. “Se aumentarán las calles de la piscina, tendrá un nuevo almacén de enseres, e incluso contaremos con un nuevo vestuario infantil”. Además, el proyecto mejorará la calidad del suelo que rodea el vaso de la piscina, la llamada ´zona de playa´.
Por otro lado, ha explicado que se tendrá “muy presente el compromiso del Ayuntamiento de Majadahonda con el medio ambiente”, que “necesariamente se verá reflejado en el diseño y mantenimiento de la instalación”, con el empleo de energías renovables, la “atención prioritaria” a criterios de eficiencia energética y la eficiencia en los consumos de agua y energías.
SEGURIDAD, ACCESIBILIDAD Y CONTROL
Explican desde el Consistorio que se va a aprovechar para realizar una actualización de las instalaciones con unos” exigentes niveles de seguridad, accesibilidad, control, protección y usos sociales complementarios”.
“La piscina lleva cerrada dos años por problemas estructurales y es nuestra prioridad poder devolver su uso a todos los vecinos. Pero lo vamos a hacer mejorando lo que tenían, y con total garantía de seguridad, para que su disfrute vuelva a ser una realidad duradera en el tiempo”, ha concluido la alcaldesa.