El equipo de gobierno de la alcaldesa de Majadahonda, Lola Moreno, tiene listo el proyecto de presupuesto municipal para 2025 que presentará para su aprobación inicial en un pleno extraordinario que se celebrará a finales del mes de octubre.
De esta forma, tras el plazo de alegaciones y la aprobación definitiva, los nuevos presupuestos podrán entrar previsiblemente en vigor el 1 de enero de 2025 para atender las necesidades del municipio desde el inicio del año, al igual que ocurrió con los primeros presupuestos del actual equipo de gobierno para el presente ejercicio 2024.
Según el proyecto, Majadahonda dispondrá de un presupuesto para el próximo año de algo más de 93,8 millones de euros, con un incremento de más del 8%, en concreto 7,1 millones de euros adicionales de ingresos respecto al presupuesto de 2024. Estas nuevas cuentas prevén también un aumento del gasto, en los mismos términos que los ingresos, con lo que se asegura el equilibrio presupuestario.
Aumentan las inversiones
Por ámbitos de actuación, Medioambiente contará en 2025 con una partida presupuestaria de 20.428.413 euros (con un crecimiento real del 1,94%); Servicios Generales y Actuaciones Transversales, con 19.197.072 euros (+3,40% con respecto a 2024); Seguridad, Emergencias y Protección Civil con 16.813.199 euros (+20,24 con respecto a 2024); Mantenimiento de la Ciudad , con 6.250.825 euros (con un crecimiento real del 3,31%); Atención Social, Mujer, Infancia, Inclusión Social y Atención a las Personas con Discapacidad con 5.790.188 euros (+12,03% con respecto al Presupuesto 2024); Educación, con 5.086.177 euros (+13,96% con respecto a 2024); Deportes con 4.659.350 euros (+24,75% con respecto a 2024); Cultura con 4.192.692 euros (+4,60% con respecto a 2024); Ordenación del Tráfico, Movilidad y Transportes con 3.102.827 euros (+18,39% con respecto a 2024); Urbanismo y Vivienda (2.529.194 euros (+4,26% respecto a 2024); Sanidad con 1.500.356 euros (+5,06% con respecto a 2024); Fiestas y Festejos Populares con 1.477.285 euros (+49,15% con respecto a los anteriores presupuestos); Empleo y Comercio con 1.024.684 euros (+16,16% con respecto a 2024); Juventud con 935.585 euros (+8,97% con respecto a 2024); Vigilancia y Control de Animales con 316.071 euros (+6,03% con respecto a 2024); Sociedad de la Información y Nuevas Tecnologías con 266.440 euros (+42,46% con respecto a 2024) y Consumo y Protección a los Consumidores con 261.402 euros (+63,87% con respecto a 2024). En consecuencia, todas las materias experimentarán un crecimiento neto respecto al vigente Presupuesto municipal 2024.
Se mantiene la moderada presión fiscal
Aunque Majadahonda se verá obligada, como el resto de municipios españoles, a aplicar la Tasa de Gestión de Basuras, al amparo de lo dispuesto en la Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular, la Ordenanza Fiscal recientemente aprobada para regularla persigue reducir su impacto económico en los contribuyentes majariegos, no solo demorando su aplicación hasta el máximo legal previsto (2025), sino también mediante la configuración de bonificaciones por aspectos medioambientales y también de naturaleza socioeconómica, entre otras actuaciones.
Simultáneamente, en 2025 entrarán en vigor otras iniciativas para rebajar aún más la presión fiscal en el ámbito local, como el incremento de las bonificaciones hasta el 15% en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) por la instalación de dispositivos de recarga para vehículos eléctricos y hasta el 30% en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) para las empresas ubicadas en Majadahonda que configuren planes de transporte urbano para sus trabajadores.
Adicionalmente, se aumentará hasta los 100 euros el importe máximo del que se pueden beneficiar los contribuyentes en caso de domiciliar sus recibos dentro del máximo legal del 5% de bonificación. Para el concejal de Hacienda, Diego López del Hierro, “se trata de unos presupuestos prudentes que tienen como objetivo generar los recursos necesarios para mejorar la calidad de los servicios a disposición de los ciudadanos, sin poner en riesgo la moderada y flexible presión fiscal de la que disfrutan los contribuyentes de Majadahonda, y, todo ello, cumpliendo los objetivos de estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera que establece la normativa vigente”.
Lopez del Hierro recuerda que Majadahonda tiene sus cuentas saneadas, sin deuda pública, y es el segundo municipio español de más de 50.000 habitantes con la presión fiscal más baja, con unos impuestos locales como el IBI o el de Vehículos de Tracción Mecánica con los tipos mínimos de gravamen legales y con una política de bonificaciones que reducen su impacto impositivo y, por consiguiente, la presión fiscal aplicada.