Se invertirán más de dos millones de euros
Boadilla del Monte contará con un nuevo acceso, que además de ofrecer una opción de salida y entrada a la localidad, reducirá los atascos que se producen en la M-513. La conexión conectará Viñas Viejas con El Encinar, por encima de la M-50, una zona por la que circulan a diario miles de vehículos.
El Ayuntamiento ha comenzado las obras y el objetivo es que “en 2023 esté operativo este vial”, han señalado fuentes municipales. Tienen un plazo de ejecución aproximado de seis meses.
Para realizar el acceso se utilizará el puente, que se encuentra entre la glorieta Equipo Paralímpico Español, en El Encinar, y la glorieta de intersección de las calles Miguel Ángel Cantero Oliva y Jaime Ferrán, en Viñas Viejas.
La nueva conexión, que supondrá una inversión de 2.354.660 euros, contará con un sentido de ida y otro de vuelta, y acera. También habrá un carril para los ciclistas.
Tras los trabajos, la calzada que pasa por la M-50 será doble y el tráfico será mucho más fluido, lo que evitará los atascos que se producían en este punto.
Además, el Consistorio instalará una nueva iluminación LED, con sistema de telegestión.