Este sábado el Cerro del Espino fue testigo de la vigesimoséptima jornada liguera, que enfrentaba al Rayo Majadahonda al Real Unión en un partido igualado que acabó con un reparto de puntos que termina por situarlos como colistas de la clasificación de Primera RFEF, tras el 1-1.
En esta vuelta a casa, los de Jon Erice tenían más presión que nunca, ya que cada uno de las dos docenas de partidos que quedaban hasta final de temporada, son cruciales para la permanencia del conjunto majariego en la categoría.
En los primeros minutos, el balón era de los majariegos que conseguían dominar el terreno de juego gracias a una alta intensidad y una circulación rápida del esférico, lo que dejaba con pocas oportunidades al conjunto vasco. El encuentro parecía estar a favor de los de Jon Erice, que lograban claras ocasiones de gol, como la de Alberto Fernández, pero volvía a fallar la puntería.
Definitivamente, la primera media hora fue para los de Jon Erice, que consiguieron imponerse en el campo y presionar la defensa rival. Pero poco a poco, el partido se trasladó al centro del campo, en una lucha por el esférico que dejó pocas ocasiones de peligro para ambos equipos. La pericia del guardameta vasco, Jon Irazusta, frenaba cada una de las intentonas de los arietes majariegos. Mientras, el Real Unión comenzó a ocasionar peligro a balón parado, pero la zaga majariega respondía con contundencia, protegiendo así la meta de Dani Martín, que se mantenía inalterada hasta entonces.
El Rayo Majadahonda seguía luchando por el control del partido, hasta que un robo cerca de la frontal, permitió a Cortés definir un disparo cruzado para estrenar el luminoso con un 1-0 en el minuto 27. La defensa majariega continuaba rechazando cada una de las subidas de los visitantes hasta llegar al descanso, aunque los últimos 15 minutos se les hicieron cuesta arriba. En los vestuarios quedó clara una cosa, había que mantener la diferencia en el luminoso para sumar los tres puntos tan necesarios.
Tras la vuelta al terreno de juego, los de Jon Erice tomaron el riesgo de reforzar el ataque para aumentar la diferencia, algo que dejaría la defensa majariega con lo justo, y que les costó dos puntos. Pese a que se vio forzado a retroceder, el Rayo Majadahonda tuvo más ocasiones que en la primera parte, pero seguía sin lograr definir. A punto estuvo Sergi de anotar el segundo tanto para los locales, pero de nuevo se estrelló contra el guardameta vasco.
A la zaga majariega se le complicaba retener el balón, y en una jugada un tanto caótica del Real Unión, Escobar, solo frente a Dani Martín, lograba poner el luminoso en tablas, 1-1, a solo tres minutos del comienzo de la segunda parte. Esto envalentonó a los vascos, que continuaron apretando las líneas locales para conseguir el 1-2. Ambos conjuntos intentaban llevarse el partido, pero ninguno conseguía definir para colocar el esférico entre los palos rivales. Sergi, Cortés y Casado lo intentaron en varias ocasiones, pero el balón se estrellaba una y otra vez contra los palos y los guantes de Jon Irazusta.
El Rayo Majadahonda siguió presionando, pero los puntos fueron repartidos. En una primera parte que fue para el Rayo Majadahonda, pero con una segunda parte que se les volvió en contra a los de Jon Erice, que solo volvieron a ser superiores en los últimos minutos. Así, el 1-1 deja solo un punto en el Cerro del Espino, dejando al Rayo Majadahonda último en la clasificación de Primera RFEF.
El colegiado amonestó a cinco jugadores con tarjeta amarilla. Por parte de los locales, Álvaro Arnedo se llevó una de las cartulinas, mientras que los visitantes, Marcos Luna, Oyarzun, Charlie Pérez y Beobide, recibieron las otras cuatro sanciones.
Ahora, como colistas, el Rayo Majadahonda tendrá que redoblar esfuerzo para enfrentar al Arenteiro la próxima jornada.
Tras el encuentro, en sala de prensa, Jon Erice reconocía que este punto “no es suficiente“. El mister majariego fue muy autocrítico, consciente de que pese a llegar en muchas ocasiones a la meta rival, no fueron capaces de definir, considerando que el resultado “es justo, sobre todo viendo la segunda parte”.
Por su parte, Casado se mostró más optimista, “seguro de que lo vamos a sacar adelante. Por ellos y por nosotros vamos a pelear hasta el final”, aunque los 11 partidos restantes complican mucho la permanencia en esta categoría, sobre todo atendiendo a los resultados del resto de equipos que ocupan la parte baja de la tabla.